UNA
VIDA NUEVA
Erase
una vez un niño al que sus padres no le querían y le llevaron a un orfanato.
Héctor, que así se llamaba, no tenía ni un año. Cuando se iba haciendo mayor
comprendió por qué estaba allí: nadie
quería adoptarle porque tenía un problema y no podía mover la mano izquierda.
Con
sólo tres años veía como se iban sus amigos con familias nuevas. Todos se
fueron. Había más niños nuevos, pero todos los que le ayudaron a adaptarse, se
fueron.
Héctor
era muy sociable y siempre hacía amigos. La gente pensaba que por no poder
mover la mano no iba a hacer vida normal, pero él se esforzaba mucho en
hacerlo.
Un
día llegó un matrimonio con un niño de la edad de Héctor. El niño era muy
atento y enseguida se dio cuenta del problema que tenía en la mano, Los dos se
miraron fijamente y enseguida fueron a preguntarse el nombre. Los padres al
verlos tan contentos adoptaron a Héctor.
Él
se lo agradeció a esa familia y fueron
felices para siempre.
Nadia Bakkali Muñoz 5ºA-E.P.
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